Hoy he comenzado a defoliar mis olivos. Aunque los objetivos principales de defoliar los olivos son el de reducir las hojas y generar más ramificación, en mi caso también me va a servir para limpiar las últimas cochinillas que quedaban de las plagas de la temporada pasada.
No voy a explicar en profundidad el defoliado. Básicamente quitaremos todas las hojas, dejando el foliolo y asegurando que no se corta la yema latente que es por dónde van a brotar las nuevas hojas y la nueva ramificación. Por seguridad, en el caso de los olivos, es mejor dejar las dos últimas hojas después de que hayamos acortado la rama a la altura que consideremos para el diseño final y así evitaremos que la rama retire savia y se seque.
Adicionalmente, las hojas que he dejado, las he limpiado con un bastoncillo y alcohol para quitar los restos de cochinillas que quedaban. También he aprovechado a alambrar ya que al estar desnudas las ramas es más sencillo.
A continuación os dejo las fotos de los trabajos.
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Uno de los olivos antes de defoliarlo |
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Detalle de las ramas |
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Ápice defoliado y alambrado |
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Rama defoliada |
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Rama defoliada y alambrada |
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Olivo terminado |
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Vista superior del olivo |
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Otro de los olivos finalizado |
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Vista superior tras el defoliado y el alambrado |