Desde hace un tiempo me empezaron a llamar la atención las macetas de bonsai. Pienso que es un paso natural según se van teniendo conocimientos en el mundo del bonsái. Al principio colocas los árboles en las macetas que pillas, luego ya te vas dando cuenta que unas quedan mejor que otras, empiezas a leer y te das cuenta que es todo un mundo sorprendente.
Con este gusanillo por las macetas y como me daba mucha envidia los compañeros que hacían las suyas propias, por casualidad, y por haber sido bueno, estas Navidades los Reyes nos trajeron un curso de cerámica y aproveché mis primeras prácticas para hacer unas kuramas que hoy os presento.
Empecé por hacer unas kuramas por dos razones, primera porqué es de lo más sencillo y segunda porqué llevaba un tiempo buscando una para una higuera que la que tenía ya se le había quedado pequeña. Todavía tengo mucho que aprender y que mejorar, pero estoy muy orgulloso de haber hecho unas macetas yo mismo que algo se parecen a unas kuramas. Os dejo las fotos de mis criaturas.