Este fin de semana, entre otras cosas, he estado matando un poco el tiempo recogiendo esquejes y plantándolos para ver si hay suerte y puedo tener más material y además experimentar. Los árboles elegidos, un arce del que he cogido algunas ramas interesantes y una higuera, que ya le iba tocando la poda y que he aprovechado para plantar algunas de las ramas que he cortado.
En el caso del arce, llevaba tiempo detrás de este árbol para hacer precisamente lo que he hecho, es decir, coger algunas ramas que ya tuvieran una ramificación interesante o brotes bien ubicados y plantarlas en tierra. De las ramas de la higuera, lo que me ha llamado la atención es que la mayoría ya tenían la corteza bastante envejecida y cubierta de líquenes que les da incluso un aspecto más interesante.
El proceso sencillo, mantenerlos en agua para que no se deshidraten, seleccionar y podar las partes que más nos interesen, hormonas de enraizamiento y a tierra. Una vez plantados al invernadero con el objetivo de que crezcan tranquilos y no se deshidraten gracias a la humedad ambiental que hay en el mismo.
Ya os iré contando como evolucionan.
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Las ramas de arce a remojo |
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Los esquejes de arce ya seleccionados y cortados |
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Esqueje de arce |
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Esqueje de arce |
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Esqueje de arce |
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Los esquejes de arce ya en macetas |
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Las ramas de higuera ya plantadas |
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